jueves, 14 de noviembre de 2013

¿Por qué adoro cocinar?

Últimamente están proliferando gran cantidad de programas de cocina, Top Chef, Master Chef, The Great British Bake off, Deja Sitio para el postre, Guerra de Cupcakes, el mismo CANAL COCINA, los canales y blog de recetas de cocina de Youtube y toda la red, y en todas partes del mundo, es un gran fenómeno social, no me malinterpretéis, no es que no lo agradezca, me encanta, como a cualquier amante y por eso me gustaría presentarme a alguno de ellos, sin embargo no termino de lanzarme porque en mi humilde opinión, es posible que se valore mucho mas la gastronomía y el oficio de cocinar, pero se abusa en exceso del espectáculo, con todas las connotaciones negativas que se puedan derivar de ello, por no hablar de perder tu anonimato......

 
La cuestión es que esto no es un monográfico acerca de la cocina en la TV, sino que el darle vueltas a estas opciones me ha hecho plantearme que significa la cocina para mi y porque me gusta tanto.
Supongo que debería empezar por el principio..........recuerdo estar en una pequeña cocina en forma de "L" azul y blanca, posiblemente el primer recuerdo consciente que tengo de mi misma, seguramente aún ni andaba  y recuerdo el aroma de una papilla de arroz y como me pareció la cosa mas exquisita, caliente y dulce que había probado nunca, con esa textura brillante y ese blanco tan neutro, claro  que para ser francos había probado poca cosa hasta aquel momento.
El siguiente recuerdo, tendría dos o tres años, subida en una silla, al lado de mi madre, en esa hermosa cocina, empinarme y mirar como dentro de un colador había unas rodajas gruesas cuyos bordes eran a rayas violetas como los de una cebra mágica y el centro lleno de puntitos oscuros, haciendo dibujos caleidoscópicos, seguramente aún ni sabía hablar pero recuerdo la sensación de estar maravillada, asombrada, estupefacta, aquello era tan increíble que se quedó grabado en la memoria, ahora que lo pienso, seguramente mi madre estaba haciendo "Morcilla de verano", porque solo parte tan gordas las berenjenas para esa receta.
Y cierro los ojos y puedo ver claramente a una niña de 5 o 6 años delante del televisor a la que su padre le ponía entre las manitas un vaso lleno de nueces y miel mientras veía Lucky Luke en la inmensa tele marrón, llena de botones, mucho antes de que inventaran los mandos y las pantallas planas.
Podría seguir y seguir contando como adoraba el día de limpieza a fondo de la cocina en casa de mi abuela, porque sacaba tooooda su batería de ollas de aluminio, la olla-horno y yo las limpiaba y ordenaba por tamaños y forma mientras que las contemplaba con adoración, me pregunto qué se le pasaría a mi  querida abuela por su cabeza cuando yo hacía aquello, una pena que ya no pueda preguntárselo.
Y al igual que mi hermana recuerda cada viaje en familia, monumentos, calles, nombres de ciudades y demás, yo recuerdo cada receta, comida y lugar relacionado con ellas, como digo en la cabecera de mi blog, mi vida en una Bitácora gastronómica.
Y es que, en resumidas cuentas, la cocina lo es todo, es una forma de arte que nos alimenta en todos los sentidos, permitiendo que vivamos, usando lo que nace y crece en la tierra, es naturaleza pura, sacando nuestro lado mas paciente, creativo, minucioso, detallista y delicado. Cuando cocinamos usamos todos los sentidos posibles, en fin, que mas se puede pedir........